algo pasa con mi compañera de piso

De nuevo ronda de conciertos. Esta vez Juan y la bruja. Y esta vez no se trata de un imperativo de Lila sino de uno propio. Un amigo mexicano (muy chingón el pinche wei) tiene unos amigos mexicanos (muy chingones los pinches weyes) que presentaban su cd. Tiene buena pinta; tocan bien, no son demasiado normales ni demasiado extraños y tienen buenos padrinos. Debe tener algo bueno un grupo que es capaz de mezclar en una misma sala a Gurruchaga, uno de Los Panchos y una colección de actrices porno. Una de ellas, en un alarde de contradicción interesante, vestía una camisa que decía "no mames". Puede que sólo fuera una señal de prohibición.
Si me repito hablando de conciertos, también me repito hablando de tv. Ya tenemos nueva tele. Sé que ya lo dije, pero es que ahora tenemos otra. Dos teles. Con la nueva no puedo evitar pensar en mis "blogmates", porque ha creado algo nuevo; había televisores en blanco y negro, los había en color...y éste es el primero en blanco y verde. Lopera estaría orgulloso.
Mis compañeras de piso se sorprenden cuando me ven aparecer con una tele. Es dificil sorprender a dos chicas que colaboran con una "shop" que vende "sex" y que no es una sex shop. Es dificil de sorprender alguien que, cuando no sabe cómo peinarse, utiliza lubricante anal. No le he preguntado si se liga mas.