ganesha, líbrame de lo normal

Una chica que llevaba ocho años secuestrada dice que nunca lo estuvo y la policía se encarga de demostrar que sí. Un tipo dice que ha abusado de una niña y la policía se encarga de demostrar que es mentira. Luego le detiene por abusar de otra niña. Detienen también a uno de los 10 hombres más buscados de Estados Unidos, acusado de ¡poligamia!. En el 60% de los casos, la orden de alejamiento la incumple la mujer maltratada que la pidió. Los astrólogos en lugar de descubrir planetas, los cubren. Universal permitirá descargas gratuitas legales. Filipinas utiliza pelo humano para parar un vertido de fuel. Joaquín se va del Betis. Muere el inmortal Naguib Mahfuz. Los grupos se ponen nombres extraños para que sea más fácil buscarlos en la web (gracias, Gnarls Barkley).

Todo rarísimo. Y a mí, seis meses después, me ha visto un médico, otro, quiero decir. El número 14. Un especialista. Y no, yo no he pensado colgar fotos de mi oído sangrando porque no me sangran los oídos. Según dice, me canso por unas pastillas que me mandaron para evitar el cansancio que tenía antes de tomar las pastillas. Y sí, soy arrítmico pero debo aprender a vivir con ello. En la ecografía todo perfecto, ha sido niña. En la prueba de esfuerzo me comporto como una persona normal de mi edad. ¿Me ha llamado normal?

Al ver las cicatrices del pecho, la muy profesional enfermera me pregunta;

-“¿tienes algún aparato metálico por ahí dentro?”

-“No, a menos que los extraterrestres me insertaran un chip aquella noche que me abdujeron”.

El médico muy serio me dice que se hubiera visto en la ecografía. Debe ser un chiste muy manido. Mi corazón estuvo mal pero ahora no lo está. Eso sí, me ha recetado deporte. Las nike no las pasa la Seguridad Social.

Estoy legalmente sano. Cuando me despierte a medianoche volveré a leer el informe médico e intentaré quedarme plácidamente dormido.

Estoy legalmente sano. Y por si alguien es supersticioso, todo ha ocurrido el mismo día que mi hermana llegaba de la India con un pequeño dios Ganesha para mí.